Quizá algún@s os preguntéis a qué viene esta entrada aunque imagino que desafortunadamente no.
Hablar de acoso escolar suele ser doloroso y detectarlo en nuestros niñ@s tarea para Sherlock Holmes. En mi caso, mi hijo no se daba cuenta de lo que estaba pasando, creía que jugaban con el, cosa que, ante estas situaciones no se si es mejor o peor.
Es muy duro para una madre (o padre) enterarse que tu hijo esta pasando por eso, darte cuenta que cuando llegaba con el culete en carne no era porque se había rebozado en el arenero si no porque otros niños le llenaban el calzoncillo de arena y el, que no entendía más, era "feliz" porque pensaba que jugaban en el y por eso se la dejaba.
Es doloroso esperar a tu niño en la parada del autobús y que llegue con la chaqueta empapada porque otros niños se la han tirado al retrete y es frustrante pedir explicaciones y por respuesta hallarse con "son niños", "es que el tuyo es así o asá" o la peor que llegué a oír "bueno mujer, tienes que entender que tu niño es diferente y como lo ven el mas débil...."😡 en este punto hay que señalar que por aquel tiempo no teníamos diagnostico alguno y la orientadora que había tampoco sabía por donde tirar (estoy intentando ser políticamente correcta).
Se perfectamente que sólo me llegué a enterar de la cuarta parte de las cosas que ha tenido que aguantar el durante ese tiempo y admito que no sé si quiero llegar a saberlas ya que, con lo poco que supe, yo si que rocé la depresión, el sentirte una madre horrible, el sentir....uff tantas cosas😭 eso sin contar el momento "porqué a mi" que ya os dije que será en una próxima entrada.
Pero todo, absolutamente todo, tiene su parte buena, o al menos yo prefiero centrarme en lo bueno. Por suerte tengo un enano que es un ejemplo de superación, esa parte de su vida sigue sin querer tocarla ni hablar de ella pero sin embargo, ahora empieza a distinguir cuando es jugar y cuando no, defiende a los demás ante situaciones injustas y me ha dado fuerzas para pelear para que nadie nunca tenga que pasar por lo que el ha pasado, ya, ya se que es como Don Quijote y los molinos pero sí sé que quieta no logras nada y a poco que cambie es un paso más hacia la utopía que desearíamos todos.
Por último, y no menos importante dejar claro que NADIE sea por el motivo que sea es merecedor de cualquier tipo de hostigamiento y la violencia JAMAS está justificada.